A la pregunta de cómo es posible expresar este sentido de "límite" que se da en el hombre, Mauricio Beuchot, filósofo mexicano, nos dice que es a través de la analogía y el ícono como podemos “abrir nuestros pensamientos a encuentros inesperados”. Así, vemos la doble función del límite, no es sólo un restrictivo de conocimiento, como tradicionalmente se concibe, sino que, a la vez, descubre que somos capaces de encontrar respuestas con una lógica diferente, “una lógica del corazón” como propondría Pascal. Por eso, explicar los límites del hombre, Dios, y el mundo, es una prueba espiritual que el hombre debe enfrentar.
¿Cómo dar cuenta del límite?
El lenguaje poético, que contenga a la vez metonimia y entimemas, es la más cercana manera de expresar el sentimiento de la captación del límite.
Considero que el siguiente poema de San Juan de La Cruz puede ayudar a describir la mística del límite que propone Beuchot, y con ello me puedo extender en más detalles de su filosofía, no sólo enfocado a lo divino, sino al hombre y el mundo mismo:
Tras de un amoroso lance
y no de esperanza falto
volé tan alto, tan alto,
que le di a la caza alcance.
Considero que el siguiente poema de San Juan de La Cruz puede ayudar a describir la mística del límite que propone Beuchot, y con ello me puedo extender en más detalles de su filosofía, no sólo enfocado a lo divino, sino al hombre y el mundo mismo:
Tras de un amoroso lance
y no de esperanza falto
volé tan alto, tan alto,
que le di a la caza alcance.
Esta primera estrofa, según mi interpretación, representa lo que Beuchot podría considerar como aquel impulso amoroso que nos jala a entender lo otro que a la vez somos nosotros. Mostrándonos que no es del todo diferente y que podemos captar lo análogo entre figuras distintas; dar a la caza alcance.
En esta segunda estrofa es fuerte el manejo que San Juan de La cruz le otorga a la oscuridad como una forma de acceder a lo divino. Beuchot nos propone, para superar los límites de la modernidad, un claroscuro. Ahora bien, para él la analogía distiende más hacía lo equívoco que a lo unívoco, es así que considero que en el lance a la comprensión de lo otro, en Beuchot también habrá más oscuridad que luz.
Cuanto más alto llegaba
de este lance tan subido,
tanto más bajo y rendido
y abatido me hallaba;
dije: no habrá quien alcance;
y abatíme tanto, tanto,
que fui tan alto, tan alto,
que le di a la caza alcance.
de este lance tan subido,
tanto más bajo y rendido
y abatido me hallaba;
dije: no habrá quien alcance;
y abatíme tanto, tanto,
que fui tan alto, tan alto,
que le di a la caza alcance.
En los primeros cinco renglones, se puede enunciar el abatimiento que expresa la posmodernidad al sentir que no hay fundamentos para el conocimiento, y que estamos desgastándonos en buscarlos. Beuchot, en negativa a esto, dice que, en vez de caer en aquel nihilismo exagerado, debemos comprometernos con una desesperanza esperanzadora; abatíme tanto, que le di a la caza alcance. La caza es el objetivo, que aunque se nos escape de las manos, nos ayuda a fundamentar de sentido y valor nuestra vida.
Por una extraña manera
mil vuelos pasé de un vuelo,
porque esperanza de cielo
tanto alcanza cuanto espera.
mil vuelos pasé de un vuelo,
porque esperanza de cielo
tanto alcanza cuanto espera.
En esta última estrofa se percibe cómo de un límite superado se abren mil más. La interpretación de lo otro puede se infinita, pues nunca llegaremos a comprenderlo en su totalidad. Le daremos alcance a un primer objetivo, pero de él surgirán más, pues la realidad es devenir, un constante fluir de lo diferente. Esta estrofa, también representa el concepto de Frónesis tan importante en la filosofía de Beuchot. Hay que ser mesurados al querer alcanzar los objetivos que se desean; Tanto alcanza cuanto espera.
La comprensión de lo otro, resulta un límite que, dentro de la filosofía de Mauricio Beuchot, es posible de asimilar mediante una hermenéutica analógica-icónica. Una interpretación que recurra al símbolo y al ícono para dar cuenta de la unión y separación que el otro manifiesta. Considero que su filosofía es un pensamiento comprometido con la pregunta acerca de lo real. Lleva en su interpretación un optimismo que no cae en lo ingenuo, sino más bien, en la búsqueda de un bien común que también respete diferencias. El límite también puede traducirse como respeto.
Bibliografía:
-Mauricio Beuchot, Los límites esenciales de la hermenéutica. UNAM. México, 2002.
-Mauricio Beuchot: ensayo titulado El vuelo de la razón simbólica o cómo remontar los límites del sentido.
-Mauricio Beuchot, Las caras del símbolo: el ícono y el ídolo. Caparros editores.
La comprensión de lo otro, resulta un límite que, dentro de la filosofía de Mauricio Beuchot, es posible de asimilar mediante una hermenéutica analógica-icónica. Una interpretación que recurra al símbolo y al ícono para dar cuenta de la unión y separación que el otro manifiesta. Considero que su filosofía es un pensamiento comprometido con la pregunta acerca de lo real. Lleva en su interpretación un optimismo que no cae en lo ingenuo, sino más bien, en la búsqueda de un bien común que también respete diferencias. El límite también puede traducirse como respeto.
Bibliografía:
-Mauricio Beuchot, Los límites esenciales de la hermenéutica. UNAM. México, 2002.
-Mauricio Beuchot: ensayo titulado El vuelo de la razón simbólica o cómo remontar los límites del sentido.
-Mauricio Beuchot, Las caras del símbolo: el ícono y el ídolo. Caparros editores.